Octubre 2025
Cada 16 de octubre, el Día Mundial de la Alimentación nos recuerda que la nutrición es un derecho humano fundamental. Sin embargo, su impacto va mucho más allá de la mera subsistencia. Para los niños, una alimentación adecuada es la base sobre la que se construye su salud física, emocional y, sobre todo, su desarrollo neurológico.
La ciencia detrás de cada bocado
La dieta de un niño es el combustible que impulsa la neurogénesis y la sinaptogénesis, procesos clave para la formación de nuevas neuronas y conexiones cerebrales.Nutrientes esenciales como el hierro, el zinc y los ácidos grasos omega-3 son cruciales para un desarrollo cerebral óptimo, ya que desempeñan un papel fundamental en la formación y mantenimiento de la mielina (Castañeda, 2016). Esta vaina lipídica, que envuelve las fibras nerviosas, es la responsable de acelerar la transmisión de los impulsos nerviosos, permitiendo así una comunicación neuronal más rápida y eficiente. Una nutrición deficiente puede tener consecuencias irreversibles en el desarrollo cognitivo.
Alimentación, emociones y conducta
El eje intestino-cerebro nos muestra la profunda conexión entre lo que comemos y cómo nos sentimos. Una dieta rica en azúcares procesados puede afectar la regulación emocional y aumentar el riesgo de problemas de conducta. Por el contrario, una alimentación balanceada favorece la atención sostenida y reduce la ansiedad, promoviendo un mejor bienestar psicológico.
Padres y educadores: agentes de cambio
Las familias y escuelas juegan un rol decisivo en la formación de hábitos alimenticios saludables. Es vital crear entornos donde la comida no sea solo nutrición, sino también una experiencia de corregulación emocional y aprendizaje. Los profesionales de la salud tienen la responsabilidad de educar sobre esta correlación neurobiológica.
La formación es la mejor inversión
Para comprender a fondo la compleja relación entre la nutrición y el cerebro, es esencial la capacitación continua. En infanciadesarrollopleno.org, ofrecemos cursos diseñados para profesionales y familias. Estos programas te darán las herramientas para optimizar el desarrollo cognitivo de los niños a través de una alimentación consciente y basada en la evidencia científica.
Referencias:
- Castañeda, B. V. (2016). Micronutrientes y neurodesarrollo: actualización. Archivos Argentinos de Pediatría, 114(6), 570-575.
- Galarza, A. (2019). Neurociencia de la alimentación: La comida como motor cerebral. Ediciones B.
- Gittleman, A. L. (2009). El milagro del cerebro. Ediciones Paidós Ibérica.
O´Connor, B. R., & Skerrett, M. J. (2018). Psicología de la nutrición: El camino a la salud mental a través de la alimentación. Editorial C&L.


