Los videojuegos se han convertido en una parte integral de la vida de muchos niños y jóvenes, generando un debate sobre sus posibles impactos en el desarrollo. En este sentido, es crucial analizar tanto las oportunidades como los riesgos que presentan en relación al desarrollo psicomotor. 

Oportunidades o beneficios

Procedamos a analizar las oportunidades de los videojuegos en el desarrollo psicomotor: 

  • Mejora de la coordinación ojo-mano: Muchos videojuegos requieren movimientos precisos y rápidos, lo que favorece el desarrollo de la coordinación entre la vista y las manos.
  • Desarrollo de la percepción espacial: Juegos que requieren una comprensión tridimensional del espacio, como los de plataformas o conducción, pueden mejorar esta habilidad.
  • Aumento de la velocidad de reacción: Juegos de acción y reflejos rápidos estimulan la capacidad de responder rápidamente a estímulos visuales y auditivos.
  • Desarrollo de habilidades cognitivas: Algunos videojuegos promueven la resolución de problemas, la planificación y la toma de decisiones estratégicas.
  • Motivación y engagement: Los videojuegos pueden ser una herramienta motivadora para el aprendizaje y la práctica de habilidades.
  • Desarrollo de la resolución de problemas: Muchos videojuegos requieren que los jugadores encuentren soluciones creativas a desafíos, lo que fomenta el pensamiento crítico y la resolución de problemas.
  • Mejora de la memoria: Los juegos que involucran la memorización de secuencias, como los juegos de plataformas o los puzzles, pueden fortalecer la memoria a corto y largo plazo.
  • Aumento de la atención y concentración: Los videojuegos que demandan un alto nivel de atención y concentración, como los juegos de estrategia en tiempo real, pueden mejorar estas habilidades.
  • Desarrollo de habilidades sociales: Los videojuegos multijugador en línea ofrecen oportunidades para interactuar con otros jugadores, desarrollar habilidades sociales y aprender a trabajar en equipo.
  • Fomento de la creatividad: Juegos como los de construcción de mundos o los juegos de rol permiten a los jugadores expresar su creatividad y construir sus propias narrativas.

Riesgos potenciales

Ahora procedamos a valorar algunos de los riesgos potenciales en el desarrollo psicomotor: 

  • Sedentarismo: El exceso de tiempo dedicado a los videojuegos puede reducir la actividad física y afectar el desarrollo de habilidades motoras gruesas.
  • Postura incorrecta: Jugar en posiciones inadecuadas puede provocar dolores musculares y problemas posturales. 
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  • Adicción: El uso excesivo de videojuegos puede llevar a la adicción, afectando otras áreas de la vida y el desarrollo.
  • Desarrollo de habilidades motoras desequilibrado: Un exceso de videojuegos puede llevar a un desarrollo desequilibrado de las habilidades motoras, favoreciendo aquellas que se utilizan en los juegos y descuidando otras.
  • Contenido violento: Algunos videojuegos pueden exponer a los niños a contenidos violentos, lo que puede tener un impacto negativo en su desarrollo emocional y social.

Enfoque supervisado

Cuando enfocamos las oportunidades, hacemos énfasis en el tipo de contenido de los videojuegos. Mencionar que los videojuegos son un riesgo sería desaprovechar la tecnología como herramienta provechosa de ahí que al contrastar tanto riesgos como oportunidades, más allá de enfocarnos en los videojuegos, es el tipo de videojuego, el tiempo de permanencia y el objetivo del mismo. 

De esta forma, como padres y cuidadores podemos optar por un enfoque supervisado y progresivo adecuado a la edad y necesidades de nuestros pequeños. Algunas alternativas pueden ser: 

  • Combinar el juego con otras actividades: Fomentar la actividad física, el juego al aire libre y otras actividades que promuevan el desarrollo integral del niño.
  • Seleccionar cuidadosamente los videojuegos: Optar por aquellos que sean educativos, estimulantes y adecuados a la edad del niño.
  • Establecer límites claros: Establecer horarios y reglas claras para el uso de videojuegos.
  • Jugar en familia: Jugar juntos puede fortalecer los vínculos familiares y promover la interacción social.

Los videojuegos pueden ser una herramienta valiosa para el desarrollo psicomotor, pero es fundamental utilizarlos de manera responsable y equilibrada. Al combinar los videojuegos con otras actividades y establecer límites claros, podemos aprovechar al máximo sus beneficios y minimizar los riesgos.

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Referencias.

 

Gentile, D. A., Lynch, P. J., & Leonard, A. K. (2009). The effects of video game playing on aggression. Psychological Science in the Public Interest, 10(1), 33-72.

 

Sherry, J. L. (2001). The psychology of computer games: Human-computer interaction in the new millennium. Human-Computer Interaction, 16(2), 117-128.